
Un grupo de chavales, usuarios habituales del prau de la escuela en Argüero donde juegan al fútbol prácticamente a diario y ante la falta de luz desde primeras horas de la tarde, solicitan a la Asociación de Vecinos traslade esta queja al Ayuntamiento, ya que durante muchos meses se ven obligados a retirarse apenas iniciados los partidos o a buscar otras alternativas.
Conscientes de la necesidad de ahorrar energía, los propios chicos sugieren que se instale un foco con interruptor o similar, para que se pueda encender y apagar cuando se precise sin que permanezca prendido de forma innecesaria.

Pues bien, esta súplica ha sido recogida por Lorena que tomó buena nota y ahora, después de un año, por fin la luz llegó.
Agradecemos desde la Asociación de Vecinos a cuantos intervienen en solucionar estos pequeños problemas, dando respuesta a peticiones ciudadanas tan justas y económicas.